01 Enero 2020
En los últimos años a habido cierta discrepancia acerca de que si desaparecerán o no los libros impresos. Nadie puede asegurar con exactitud que sucederá en el futuro. Lo que si, es que es demasiado evidente el hecho que gracias al entretenimiento que suelen proporcionar los celulares y tabletas, es cada vez más difícil que un niño menor de 10 años se pueda entretener con las “simples” imágenes de un colorido libro ilustrado impreso (lo más triste es que, no sólo solemos ver estas clase de actitud en los niños. Quizá, una parte de ese miedo a la desaparición de libro impreso tenga una parte de fundamente en esto).
Ahora bien, dicho esto, ¿es posible mantener cautivo a un niño de 3 años durante una hora, sin la necesidad de estos aparatos, y además, que sea en favor de su aprendizaje? Pues si, y lo mejor de todo es que viene en formato de varita mágica. La cual de magia no tiene ni gota, pero de lo que si esta llena es de un buen diseño UX; el diseño UX es aquel que trata de mejorar la experticia del usuario tiene al interactuar con un producto, tanto físico como digital, al mismo tiempo que asegura que se encuentre un valor en lo que este proporciona.
Como iba diciendo, esta varita mágica funciona a través de la visión por computadora o también conocida como visión artificial, la cual es una tecnología que procesa, analiza y comprende imágenes del mundo. Esto permite que la lectura, e incluso el aprendizaje, con los libros de Habbi Habbi se vuelva una experiencia mágicamente entretenida para los niños.
Habbi Habbi es una compañía que lanzó libros bilingües en español y mandarín para niños de 1 a 10 años, los cuales, junto con esta varita, vuelven interesante el aprendizaje de un nuevo idioma. Anne-Luise Nieto y Hanna Chiou, co-fundadoras de esta compañía, al ser madres y buscar una manera accesible, ideal y viable para hacer aprender a sus hijos un segundo idioma, llegaron a esta función de impresión y tecnología.
Este diseño funciona, gracias a que las co-fundadoras se dieron cuenta que a los niños les gusta sentirse emparedados y como si estuvieran dominado una nueva habilidad. Por lo que, para los niños que aún no saben leer los libros, la varita se vuelve un medio que los hace sentir que están leyendo por ellos mismos.
Para cada idioma, hay cuatros libros que cubren las primeras palabras, las primeras frases, las emociones y las carreras. Y con una completa compatibilidad con cada uno de estos libros, la varita es capaz de identificar los píxeles en las páginas, leyendo las palabras, ¡e incluso las ilustraciones!, y es otra razón por la que este diseño UX funciona es porque las co-fundadoras se dieron cuenta que a los niños también les gustan los juegos donde hay muchas más posibilidades de lo que parece.
Así que por esta razón, al posicionar la varita sobre alguna ilustración, los niños pueden encontrarse con algún huevo de Pascua en forma de alguna canción u sonido peculiar. Por tanto, los niños se mantiene enfocado en la experiencia por que nunca sabes dónde pueden encontrar una nueva sorpresa.
habbihabbi.com