Muchas de las empresas en Brasil y América Latina todavía tienen un concepto familiar, en la que el emprendedor invierte en el segmento a partir de la adquisición de una maquinaria
Independiente del porte o del segmento de actuación, hoy en día el mercado está competitivo para todos. Conforme se van desarrollando las tecnologías, la industria expande y los profesionales son desafiados a innovarse para mantener la competitividad. El escenario político-económico mundial también agrava la situación, haciendo con que muchos empresarios tengan dificultades para ampliar sus negocios por la crisis.
En estos casos, los países subdesarrollados son los que más sienten los reflejos negativos. En general, la situación es una "bola de nieve". Cuando el empresario siente que su negocio pasa por una dificultad financiera, tiende a retraer la producción, disminuir el personal, y así contener gastos. Según aumenta el desempleo, el consumo disminuye y la producción cae aún más, lo que resulta en más despidos. Así, las industrias van "cavando la propia cueva".
DÍA A DÍA
Además de las dificultades externas, el empresario gráfico también enfrenta muchos otros desafíos en el día a día operacional de la empresa, que desbordan el ámbito de la producción, como los plazos de entrega ajustados, los recortes presupuestarios, la seguridad, la satisfacción del equipo, el control del stock, la asistencia técnica, la excelencia de los productos, el flujo de caja, entre otros factores. Los estudios muestran que alrededor del 40% de los costos operativos de las gráficas se destinan a infraestructura/TI, stock y flete. Es decir, frente a tantos desafíos, parte significativa del flujo de caja del negocio es consumido para atender fallas en la integración de los departamentos, retrasos en las entregas, mantenimientos no programados de equipos, problemas en el inventario, mala gestión del stock, desperdicio de material, pausas de los equipos de producción por falta de materia prima, entre otros.
LA DIFERENCIA SE HACE CON EXCELENCIA EN LA GESTIÓN
Los obstáculos son inevitables e impresionan cuando aparecen. Además de estar a merced de la situación político-económica del País, el empresario gráfico tiene mucho que perder al estar en las manos de herramientas de gestión ineficientes que no solucionan las principales dificultades internas de producción. La ineficacia de la gestión y la falta de herramientas para hacer una buena planificación de producción resultan en cuellos de botella en la producción. Todos estos impedimentos pueden ser minimizados cuando la gráfica tiene una tecnología personalizada. Muchas de las empresas en Brasil y América Latina todavía tienen un concepto familiar, en la que el emprendedor invierte en el segmento a partir de la adquisición de una maquinaria. Sin una planificación estratégica, el negocio evoluciona con procedimientos y decisiones tomadas basadas en el feeling de cada empresario. Este formato de gestión, de manera general, resulta en el crecimiento desestructurado. Lo que gana relieve en un escenario tan competitivo como el actual, incluso el negocio puede perder mercado y llegar a bancarrota.
¿CÓMO USTED ESTRUCTURA SU EMPRESA?
Direccionar la producción para un determinado nicho y comprender cuáles son los diferenciales competitivos (velocidad, calidad de colores, eficiencia técnica, entre otros) es un camino exitoso para el negocio. Sin embargo, la empresa necesita tener flexibilidad para cambiar, si identifica otro mercado de interés. Al final el mundo está en constante cambio y, consecuentemente, las producciones necesitan actualizarse para atender las demandas y tendencias actuales. En vista de innumerables cambios, se hace necesaria la recolección de datos de los procesos internos para que se haga eficiente la gestión de la producción. Caso contrario, además de la dependencia de algunos colaboradores, se compromete la seguridad de la información, los datos se vuelven incorrectos y los informes imprecisos. De esta forma, el empresario no tiene base para proyectar el futuro del negocio.
Con una planificación estratégica a largo plazo, resulta más fácil entender qué soluciones merecen inversión. En una rápida reflexión, si tres impresoras trabajan las 24 horas del día, durante siete días a la semana y los trabajos están siempre atrasados, ¿qué hay que hacer? ¿La inversión debe destinarse a la compra de más máquinas o en la eficiencia operativa? En su gran mayoría, los empresarios creen que la respuesta a una producción que no suple su demanda seria la inversión en una nueva impresora. Sin embargo, está demostrado que la excelencia en la productividad eleva el rendimiento. Y eso sólo es posible por medio de una gestión eficiente que permita la integración de los departamentos de la empresa y automatice las etapas. Este concepto es un diferencial para la gráfica, garantiza procesos estandarizados y producciones de alta calidad, independiente de quién las coordine.
Los sistemas de gestión automatizados se destacan por elevar la eficiencia de la producción y permitir una visión amplia de todas las etapas, eliminando trabajos manuales y minimizando errores humanos. Muchas empresas poseen un conjunto de softwares, planillas y colaboradores que pueden ofrecer un bosquejo de lo que sucede en la producción, sin embargo, incluso aquellas que ya cuentan con un sistema de gestión genérico, muchas veces no pueden adaptarlo a las particularidades de su flujo de trabajo porque los informes no son precisos y las informaciones están en manos de los operadores, llevando a acarrear fallas en el puesto-cálculo y caída de la rentabilidad.
EFI Metrics Printware es un software desarrollado especialmente para el mercado gráfico y de paquetes, que ofrece una amplia visión de lo que realmente sucede en el negocio. Una herramienta que facilita la toma de decisiones y contribuye a elevar la rentabilidad. Entre sus funciones, el sistema facilita la recolección, el compartir y el análisis de datos, optimizando las etapas operativas. De forma simple y accesible, integra todo el flujo de trabajo, desde la prospección de nuevos clientes, presupuestos, impresión, facturación hasta el control financiero. Además, la solución se puede integrar a los departamentos de contabilidad y recursos humanos.
Entre sus beneficios está la eliminación de retrabajos y operaciones manuales, reducción de costos y el aumento de la eficiencia. El sistema proporciona progresos continuos en negocios de diferentes tamaños, desde empresas locales hasta grandes organizaciones, siendo la solución con mejor adherencia del mercado. Simplificando decisiones e identificando tendencias, permite el avance para todos los departamentos internos, desde gerencia y equipo hasta el propio cliente.