Hace 20 años nuestros negocios funcionaban de manera regular, sin cambios trascendentales respecto a décadas anteriores. Al incursionar el internet en nuestras vidas todo cambió y con ello también las necesidades de nuestros clientes, la exigencia de las audiencias y la creatividad visual.

Es así que sin saber cómo, quienes continuamos en el negocio, ahora seguimos ofreciendo impresos pero también productos digitales y muchas veces puede ser un error entregar el mismo material en diversos formatos, por eso te damos algunos consejos para que puedas seguir innovando y no morir (con tu empresa) en el intento. 

Las audiencias

Los entregables de una campaña offline agradecerán impresiones de calidad, colores nítidos y en el caso de branding, por ejemplo tarjetas de presentación de un negocio, será indispensable, aunque parezca obvio, tener todos los datos de contacto del cliente. 

A diferencia de una campaña online, dirigida a redes sociales, los mensajes deberán ser mucho más cortos y creativos aún siendo para clientes corporativos. La información de contacto no es tan necesaria en los entregables ya que la experiencia de usuario en Internet se presta a mandar un mensaje en las plataformas donde la empresa existe. 

Diferenciar contenidos

Muchas de nuestras imprentas ya hacen la labor también de agencias de publicidad y aunque de origen no está mal, sí debemos entender que los productos que realizamos deben ser completamente diferentes para cada tipo de campaña. Muchas veces se comete el error, por parte de la agencia y del cliente de imprimir un flyer para calle y al mismo tiempo subirlo a redes sociales esperando el mismo impacto. 

Si bien entregado mano a mano en la calle puede tener éxito ya que la persona puede guardarlo y leerlo con calma en casa, en campañas digitales la velocidad de un “scroll” salta fácilmente tu  contenido, por lo que un atractivo vídeo corto o un banner que incentive un llamado a la acción a ver más información puede ser tu solución. 

 - Omar Romo